16 de noviembre de 2012

Salve a Umbanda!!!




UMBANDA Y EL ESPIRITISMO
A 104 años de vida

Introducción

El interés por el estudio e investigación de las religiones afro brasileras por parte de la Academia,  surgió luego de la abolición de la esclavitud cuando el negro africano pasa a convertirse en ciudadano independiente. El problema del momento, era saber si el negro era integrable, o no, a la naciente Nación y es importante remarcar que esta situación solamente le interesaba a los hombres de ciencia y no a sus gobernantes.

Para la Nación brasilera, (en aquel momento histórico) el africano libre era un gran problema. Quien otrora fuera la maquinaria de producción del País, que dio sustento a la economía de Brasil y colaboró con la riqueza de la mayoría de los potentados de ese País, era objeto de estudio con el fin de saber si eran asimilables, o no, a la cultura, occidental judeo cristiana. 


Las primeras conclusiones, no se hicieron esperar: “…el negro brasileño pertenece a otro mundo y permanece impermeable a las ideas modernas”. 1Las ideas modernas implicaban, (ni más ni menos) la desafricanización de los esclavos, cosa que habían logrado con la asimilación de los indígenas. De cualquier manera, donde más se pudo apreciar esa asimilación, fue en el sincretismo religioso, el cual esbozaba un aparente fondo católico, tras el cual, se ocultaban las Divinidades africanas e indígenas.

De éste proceso histórico surgen las religiones afro brasileras, entre las cuales surge Umbanda como una de las mayores expresiones de la población americana, que se identifica con la magia africana, la tradición indígena, los principios cristianos de los europeos y la metafísica de los Hindúes. Umbanda, que surgió en medio de las capas sociales más carenciadas de Brasil, hoy día, es la Religión con mayor proyección sobre la población brasileña.

Tal como coinciden la mayoría de los investigadores que han abordado el tema Umbanda, dicen que ella es una Religión de carácter esencialmente naturalista, espiritualista y espiritista. Estas conclusiones (se deben en gran medida) a los propios Sacerdotes e intelectuales umbandistas, quienes observando el mundo de las formas  y entendiendo al mundo espiritual,  han llegado hoy a esas conclusiones filosóficas, que no pretenden ser definitivas, porque el Universo se crea y se recrea constantemente.

Pues bien, según se nos ha enseñado, Umbanda es una Religión de origen multi cultural y multi étnica, por ello, a nadie debería extrañar que existan diferentes formas de prácticar, o ángulos de interpretación. Según estimamos nosotros y otros estudiosos umbandistas, Umbanda se encuentra en un proceso embrionario de su desarrollo y dado su origen multi cultural, permanece  en constante adaptación y re-adaptación.

Somos naturalistas y no ecologistas porque nos servimos de las energías que de la naturaleza emanan y que no son una invención de nosotros, por el contrario, ellas están disponibles para todos. No nos consideramos “animistas” en el sentido que se le da esta palabra: “darle vida a la materia condensada en los tres reinos básicos: mineral, vegetal y animal” por el contrario, el Creador no nos otorgó el poder dar vida a la naturaleza, simplemente descubrimos que estos reinos están animados por Seres en evolución. A su vez, ellos son el medio por el cual los Orixas manifiestan su poder volitivo, el Axé: Poder de realización, es decir, ese poder concretizado en la naturaleza y que nosotros los Afro Umbandistas extraemos de los reinos antes mencionados para restituir energías emergentes de nuestros cuerpos.

Somos espiritualistas, por que creemos que la vida trasciende la materia, y se evidencia en la evolución del alma, o sea, la expansión de la consciencia en todos los planos de existencia. De modo que, alentamos y estimulamos la evolución espiritual como el objetivo fundamental para nuestro crecimiento personal.



Somos espiritistas porque creemos en la existencia de los Espíritus, y en la posibilidad de comunicarnos con ellos, (en nuestro caso) a través de la mediunidad de incorporación. Creemos que los Espíritus somos increados y coeternos juntos al Creador, que estamos conformados por la misma esencia del Creador, pero que no somos el Creador en sí mismo.

A su vez, nos definimos espiritistas por lo anteriormente expuesto y porque consideramos al Espíritu, junto al Creador,  la máxima expresión de la existencia misma. Del mismo modo, acreditamos que los Espíritus somos co-creadores, que también tenemos el poder de crear y transformar la existencia en todas las dimensiones donde los espíritus evolucionan. 
A nosotros nos han enseñado que ser espiritista es tener la posibilidad y capacidad de conectarnos con los planos superiores donde moran los Espíritus desencarnados sin vehículo físico. A esta capacidad o virtud que se nos ha conferido, la llamamos “mediunidad”, o sea, un Ser Humano dotado de distintas capacidades para oficiar de medio de comunicación entre el plano terrenal y el plano astral.2

Por ello, nuestra doctrina se centra, se concentra, en la observación, estudio e investigación sobre los procesos mediúnicos y los fenómenos espíritas y de otros órdenes: elementares, elementales y energéticos vibratorios de diferentes frecuencias, que por su origen puedan afectar al médium, al ritual y al Terreiro en sí mismo. 3

Un poco de historia Umbandista

Valiéndonos de esta apretadísima introducción, panorámica, (que siempre es prudente realizar) nos vamos aventurar en compartir algunos conocimientos que hemos adquirido a lo largo de nuestra iniciación. Vamos a internarnos en uno de los tres principios mencionados al inicio de esta introducción como forma de homenajear Umbanda en estos 104 años de vida: Espiritistas.

Desde su “re-nacimiento” en suelo brasileño, Umbanda a tenido que recorrer infinidad de caminos y salvar un sin fin de obstáculos, para su posterior evolución y definitiva instalación en la sociedad brasileña.

Sin dudas, el escenario donde Umbanda nació (socialmente), no era el más alentador y exigió un gran esfuerzo desde el plano astral y a los hijos de fe que tuvieron que hacer lo posible, e imposible, para sostener la bandera umbandista. Brasil, un país surgido social, política y económicamente gracias al sistema esclavista 4 más acérrimo y autoritario, apoyado y controlado por la Iglesia Católica, quien impartió la base moral, ética y social, del País; por cierto, no era un buen terreno para su re-surgimiento.

Por lo anteriormente dicho, vamos aventurarnos a realizar un repaso histórico de la situación social y religiosa del Brasil del siglo XVIII. La abolición de la esclavitud, trajo consigo un grave problema para la sociedad brasileña (como fue destacado anteriormente) los negros libres eran una dura competencia de mano de obra barata. A su vez, grande fue la migración de grupos de esclavos que se trasladaron a distintas regiones de ese enorme País, en busca de un futuro mejor. La Amazonia, Recife, Pernambuco, y otras zonas,  reductos indígenas por excelencia, fueron inter penetrado por los africanos libertos y cimarrones, propiciando la miscigenación cultural y religiosa.

Así pues y de esta manera, se fue gestando la temida unión entre negros e indios, quienes despojados de sus derechos ciudadanos optaban por guarecerse en las franjas periféricas de las grandes ciudades brasileñas esperando una mejor oportunidad de vida, de ello surgen lo que hoy conocemos como: Favelas.

De aquella mistura, surgieron como hongos luego de la humedad, las diferentes manifestaciones religiosas que hoy conocemos: Tambor de Mina, Xangó de Recife, Candomblé de Caboclos, Catimbó, Babasué, Macumba y otros. De esta manera, los indígenas unieron sus Deidades a las Deidades africanas potenciando el poder de los “Santos” o “Encantados” de origen Tupí Guaraní, con los Orixás Yorubas, Voduns  y los Inkisis bantúes, destacándose de todo ello, el Espiritismo indígena y el Espiritismo Bantú.

No es novedad para nadie, Brasil es uno de los países más católicos del mundo, ello se debe a que la Iglesia Católica, siempre estuvo íntimamente relacionada a los procesos colonizadores de Brasil, y si no veamos: la catequización  forzada de los indígenas y esclavos, la educación de los hijos de los señores de ingenio y en la garantía del orden social de una sociedad básicamente esclavista.5

Es más, el gobierno imperialista de aquel momento, (tutelado por la Iglesia Católica) en la Constitución de sus leyes, decía en el artículo 5to.:”se permite la coexistencia de otras religiones además de la Oficial. Exigía, con todo, que las mismas se limitasen al culto doméstico o particular en locales apropiados, desde que no presentasen forma exterior de Templo…”, Mismo así, la práctica de otras religiones no era fácil, una vez que, el decreto 2.711 del 19 de diciembre de 1860, establecía que toda sociedad religiosa o política necesitaba de la aprobación de las autoridades eclesiásticas para funcionar.6         

A pesar de las lamentables condiciones en que se originó el encuentro entre los naturales habitantes americanos, los esclavos africanos y los colonizadores; de cualquier manera, a partir de este hecho se comenzó a gestar allí (como nunca en la historia del hombre) la confluencia de las cuatro razas: roja, negra, blanca y amarilla. Este encuentro a su vez, propició un intercambio cultural y religioso que posteriormente constituyó el origen del sincretismo religioso en el Continente americano, el cual más adelante se convertiría en la base de todas las manifestaciones religiosas afro americanas.

El encuentro entre el indio y el Negro, se dio casi en forma natural a pesar de los esfuerzos de los Señores de Ingenio por crear rivalidades entre ambas razas con el fin de asegurarse el poder y control sobres ellas: “divide y reinarás” dice el viejo adagio. Pero ello no fue impedimento para que la fusión cultural y religiosa de las capas sociales menos favorecidas de la naciente República Federativa del Brasil, se fusionaran y fueran creando así el origen de la religiosidad brasileña.
Para que el amable lector tenga una amplia visión de las naciones y culturas que le han dado forma y contenido a Umbanda, nos vamos a introducir, especialmente, en las naciones bantúes, que, (según textos que así lo avalan) el nombre Umbanda y principios que la conforman, son de origen, precisamente Bantú.

Los Bantúes han constituido, sin dudas, el elemento dominante de la población esclava a lo largo de todo el continente americano, sin embargo, en el área religiosa, lenta y paulatinamente fueron perdiendo terreno ante las demás naciones: Yorubás, Dahomenianos, Fon, e incluso, católicos. Es esta permeabilidad de los Bantúes al mundo circundante, lo que ha hecho que, a pesar de su gran número, hayan conservado pocos rituales verdaderamente fieles a sus orígenes étnicos.

Las razones pueden ser diversas, una de ellas, es que los bantúes eran muy apreciados por su fortaleza física y su conocimiento sobre agricultura, por ello, fueron establecidos en zonas rurales, a diferencia de los Yorubás, los Fon, los Minas que eran escogidos como “esclavos domésticos” remitidos a los centros urbanos, donde podían reunirse sin dificultades para reavivar sus tradiciones, culturales y religiosas. Cosa que les era muy difícil para quienes trabajaban en el campo, ya que las distancias y los controles de los amos eran muy estrictos. 
El trabajo en las plantaciones, además de la dureza del mismo, generaba más dificultades para reconstituir las naciones o linajes, que aquellos que se encontraban instalados en las zonas urbanas. A su vez, -si tomamos en cuenta que- los Bantúes eran más fáciles de influenciar, o sea, de moldear y cristianizar por la cultura dominante, y si a esto le sumamos que ser un negro cristianizado en una sociedad en que los moldes europeos servían como salvo conducto, les permitía tener una mayor libertad y  movilidad. 

Sin embargo, algunos de sus grupos, como es el caso de los “Cambinda”, conservaron un ritual que, según Roger Bastides, M.J.Herskovits, Donald Pierson y otros, que han estudiado con particular esmero a las naciones bantúes, aseguran que, la Cábula, fue el origen de la Macumba y posteriormente, ésta, de Umbanda. La Cábula, ritual indiscutiblemente bantú, donde se invocaban Espíritus del linaje y de cuño familiar, habría sido, el origen de la Macumba. Allí, se convocaban y evocaban diferentes Espíritus: Ganga-Zumba, Canjira-Mungongo, cubango, Sinha-renga, lingongo, Lemba, Calunga y otros.7

Las prohibiciones y persecuciones eran moneda corriente, por ello, las reuniones se realizaban en estricto secreto, generalmente  en espacios poco accesibles como ser la floresta enmarañada, o el propio monte. Estos rituales eran dirigidos por un sacerdote conocido como: “embanda”,  el cual a su vez, era asistido por un iniciado llamado “cambonde” y a esas reuniones de los iniciados se la conocía como:”camanás” o “engiras” que estimulaban el acercamiento de su Espíritu protector: “Tata”; todo ello  mediante canciones y toques de tambor.  Cuando el individuo entraba en transe, es decir, cuando recibía su Espíritus protector, a ese estado se lo conocía como: “tener el Santo”.8

En estas reuniones también se proferían rezas e invocaciones en medio de canciones, bailes y toques de tambores. Este ritual se erguía sobre tres bases litúrgicas, a su vez sincretizadas con el Catolicismo, conocidas como mesas anuales, donde se homenajeaba a diferentes Deidades: Santa Barbara, Santa María y San Cosme y San Damián.

Finalmente aparece también el culto en  que los espíritus que vienen a incorporarse son sobre todo espíritus de muertos, sin duda esto es lo que queda del culto a los antepasados, pero como no quedan linajes, los antepasados que incorporan no son ya Espíritus familiares, sino, antepasados esclavos de la Raza Negra, por ejemplo: el Pai Juan, el Pai Joaquin, la Tía María y otros.

Se cree que la Macumba es una derivación directa de estos cultos, fuertemente sincretizados con elementos Yorubas, indígenas, católicos y espiritistas, pero en la que básicamente predomina la influencia Bantú. Esta influencia, -según vemos- es básica, estructural y esencial y estamos haciendo referencia a la invocación de Espíritus, que era ritualísticamente habitual entre los Bantúes, sin que ello fuera una limitante para cultuar espacios de la naturaleza asociados a los Tata Inkisis.9   

La Macumba, que mayoritariamente se desarrolló en el Estado de Río de Janeiro, cobró gran auge popular a través de las fascinantes manifestaciones ritualísticas en las que se mezclaban Espíritus de Indígenas, esclavos africanos y todo tipo de Almas, algunos de estos rituales, sin control y orden aparente.

En la Macumba de Espíritu Santo, por ejemplo, sus rituales constaban de dos etapas importantes. Según señala Roger Bastides, en primer lugar se invocaban los Exus, siguiendo el mito africano de que Exú es el Señor de los Caminos, por lo pronto encargado de abrirlos para que otras Entidades “lleguen” sin dificultades, como el caso de los Caboclos y Pretos Viejos, que se manifestaban posteriormente.


En cambio las Macumbas de Río de Janeiro y Guanabara, menos organizadas aún que las anteriores, eran giras casi alocadas, sin ton, ni son, donde se manifestaban indistintamente, sin responder a ningún tipo de ordenamiento, Orixas, Exus, Caboclos, Pretos Viejos, Almas desencarnadas, convirtiendo todo aquello en lo que se dio a conocer como:”Bajo Espiritismo”.
No menos importante ha sido el aporte del Kardecismo, o sea, el Espiritismo, cuya doctrina en los comienzos de la legitimación de Umbanda en Brasil, sirvió de soporte filosófico, científico y doctrinario para los primeros religiosos Umbandista de otrora, quienes encontraron en esta, la fundamentación de las bases doctrinarias de la naciente Religión “brasileña”.

Como es de conocimiento general, Allan Kardec fue quien implantó lo que hoy conocemos como espiritismo 10 y a su vez, mediante sus estudios, estableció una codificación u ordenación de los diferentes tipos de Espíritus, según su condición “moral” y conocimientos adquiridos en su último pasaje terrenal.

Siglos después sus seguidores expulsaban de sus mesas a Espíritus que, -según ellos entendían- eran atrasados por que en su manifestación revelaban haber sido esclavos africanos o indígenas, en su último pasaje terrenal. Otra barrera con la que se enfrentaban estos Espíritus, eran los propios rituales africanos, donde tampoco encontraban espacio para manifestarse, porque allí donde “baja” un Orixá, no hay lugar para los egunes.

Cuando estas Entidades integrantes de la Cofradía de Espíritus Ancestrales, comenzaron a manifestarse por medio de la mediumnidad en rituales de cultos practicados por africanos e indígenas, mezclados con elementos del catolicismo popular, fue tomando forma hasta convertirse en lo que hoy día conocemos como Umbanda.

Estos procesos espirituales fueron gestando el advenimiento de nuestra Umbanda, de cualquier manera, no fue tarea fácil para los primeros umbandistas11, quienes intentando homogeneizar y legitimar las bases doctrinarias de Umbanda, caminaban a tientas, protagonizando (incluso) enfrentamientos entre los propios umbandistas.

A mediados del siglo XX, Brasil vivía uno de sus momentos políticos y sociales más frenéticos, (si se nos permite decir) porque se comenzaba a construir uno de los procesos más importantes de la República y el movimiento umbandista no fue la excepción.

Debido a ello, la década del 40  fue uno de  los períodos  más activos dentro del colectivo umbandista, quienes aprovechando los movimientos reivindicativos del momento y el estímulo del Estado hacia la colectivización de los sectores más desprotegidos; se crearon y surgieron distintas Federaciones con el fin de aglutinar y organizar a los umbandistas. En efecto, la proliferación de Federaciones en la década del 40, no fueron casuales, pues ello obedecía al modelo político de aquel momento que fue hábilmente aprovechado por los intelectuales umbandistas.

Valiéndose pues, del surgimiento de la República, presidida por Getulio Bargas, quien estimulaba la colectivización de los segmentos menos favorecidos y todos aquellos movimientos legítimos brasileños, ofreció a los Sacerdotes umbandistas los elementos necesarios para legitimar al movimiento umbandista.

La bandera que esgrimían aquellos pioneros era que: “Umbanda es una Religión genuinamente brasilera” pues ella es representativa de todo el pueblo, que se ve reflejado en los Caboclos, (indígenas)  en los Orixás y Pretos Viejos de origen africano y en el catolicismo popular en expansión en aquel momento.

José Alvarez Pessoa, uno de los dirigentes de las 7 Tiendas ideas por el Caboclo de las 7 Encrucijadas, en su libro: Umbanda Religión de Brasil, decía que: “Umbanda es una Religión genuinamente brasilera, porque reúne las contribuciones de las tres razas que conforman al pueblo brasilero. En ella encontramos, la experiencia del blanco, la tradición indígena y la magia del negro. Y porque reflejaría también, los deseos de un pueblo que es cristiano por principio y sentimiento, espiritista por intuición y que adora las cosas de la magia”.

Sin embargo, esto no siempre fue visto de esta manera, abundaban quienes pensaban radicalmente opuesto. Ejemplo de ello, fue la Unión Espiritualista Umbandista de Brasil la que tuvo la visión de lograr un acercamiento con las autoridades públicas -muchas de ellas simpatizante de Umbanda-, para que a través del Estado, aquella lograse el propósito perseguido por algunos Sacerdotes e intelectuales umbandistas: Codificar Umbanda.

Esta pretendida codificación trajo consigo un sin número de enfrentamientos entre quienes  eran defensores de la Umbanda blanca. Estas parcialidades tenían como único objetivo tomar distancia de los cultos africanos con el claro objetivo de homogeneizar un producto doctrinario que no fuera confundido con los ritos de matriz africana e indígena.

En uno de los tantos congresos organizados por la Federación Espiritualista de Umbanda,  los Sacerdotes umbandistas en su discurso, aseguraban que, Umbanda tendría su origen en una antigüedad muy remota, Atlantes, Egipcios, e Indúes, con la clara intensión de separarla de todo lo que pudiese ser de origen cultural indígena o africano.

Los discursos a favor de la separación del barbarismo negro y la ignorancia de los indígenas de Umbanda, no encontraban límites. Por lo pronto, para que Umbanda formase parte de los pilares de una sociedad que se pretendía “civilizada” habría que resguardarla de todo aquello que representase “atraso”. La idea del negro vagabundo, borracho, ignorante, grosero, prejuicioso y mentiroso, no encajaba con la concepción, de que luego de su muerte pudiese convertirse en un Ser de luz, y como si esto fuera poco, que semejantes Espíritus, conducieran o guiaran los destinos espirituales de los “blancos, civilizados”.12 Faltaba más.

De forma que, no es de extrañar que el espiritismo –sobre todo kardecista- asociado a la clase media de Brasil, blanca, “civilizada” que ya había adquirido un determinado prestigio, fuese tomado en su momento como base para fundamentar el “espiritismo de Umbanda blanca”. Lamentablemente, la lógica imperante en la construcción de la legitimación de Umbanda, pasó por una identificación próxima al kardecismo y más distante de las religiones de matriz afro e indígena vistas como fetichistas.

De cualquier manera, ellos no negaban la herencia indígena y africana de las manifestaciones umbandistas, ¿cómo negar las manifestaciones culturales de los negros que maravillaban al mundo y hacían de Brasil un País de lo más alegre y pintoresco? Brasil era conocido por su música, sus carnavales y el fútbol  surgido y jugado por los afro descendientes, con asombroso arte y plasticidad. Pero a pesar de los pesare, las contradicciones del naciente nacionalismo brasilero, también afectaban a nuestros religiosos, que buscaron asidero doctrinario en el discurso kardecista más fundamentado en las perspectivas evolucionistas y científicas. Es decir, valorizaban el aporte africano e indígena formadoras de la nacionalidad, pero, al presentarse como espíritas ganaban la aprobación y confianza de los gobernantes.

Esta pequeña muestra de la historia de nuestra Umbanda, no tiene como objeto ningún tipo de caza de brujas, o reivindicaciones de tipo alguno, por el contrario, una simple auto-crítica  que espera que nos veamos tal cual somos, porque seguramente, ningún Caboclo o Preto Viejo nos lo echará en cara.
Esta es una muestra más de que se puede ser umbandista de fe y a su vez, discriminar a los negros e indígenas, o sea, nos podemos apropiar de su cultura y religiosidad, y no pensar cuanto de ello estamos profanando, como lamentablemente observamos. Muchos de nosotros admitimos ser afro umbandistas, sin embargo, en nuestro accionar actuamos en base a la mentalidad imperante, que se cree superior e infalible: blanca, occidental judeo cristiana. Nos guste o no, estas profundas contradicciones, forman parte  del cotidiano de nuestras vidas, ¿o acaso, el racismo y la discriminación, ha cesado?

Cuando Umbanda llegó al Uruguay, se instaló entre las franjas menos favorecidas de nuestra sociedad, es más, ni siquiera llegó a la frontera de la clase media uruguaya, más afecta aquello que sostenía Don Juan Zorrilla de San Martín:   “…en Uruguay, especialmente, existe un predominio de sangre española fundadora que se transmite indisoluble y conjuntamente con las creencias cristianas impresas configura una sólida identidad desde el origen social hasta aproximadamente los comienzos del siglo XX...”13
Umbanda llegó y con ella, su marca registrada, “esas son cosas de negros e indígenas”, de modo que, no se deben mezclar con la gente civilizada y de buena familia. La intolerancia, que es uno de los peores microbios de la humanidad, no se hizo esperar, la Policía que es el brazo ejecutor del Poder, inmediatamente tomó cartas en el asunto, los allanamientos, las detenciones, las roturas de imágenes, las humillaciones de todo tipo y destrozos en los Terreiros, eran moneda corriente.
La única posibilidad que existía para realizar los rituales, era que el Terreiro estuviese registrado en el DEPARTAMENTO DE ORDEN PUBLICO 14 de la Jefatura de Policía de Montevideo, su nombre lo dice todo. Pues sí, éramos considerados poco menos que, delincuentes bajo vigilancia, cosa que también pasaba en Brasil, como ustedes habrán visto. Y como en Brasil, en Uruguay también imperaba la misma mentalidad, en nuestro caso “europizarnos”.

Vamos a citar un solo ejemplo, ya que la lista de intelectuales uruguayos que pensaban lo mismo, es extensa. El Dr. Julio Ma. Sanguinetti (que era y es un ferviente entusiasta de esta teoría) en ejercicio de la Presidencia de la República, en uno de sus discursos comentaba: “...aquella España y aquella Italia que vino más tarde, pudieron un día acoger a hombres y mujeres de todos los horizontes del mundo, que están en nuestra sangre y que están en nuestra cultura y que vinieron todos buscando aquí o libertad religiosa o libertad espiritual o tolerancia... Y así fueron los suizos, los valdenses, los franceses, los armenios, los judíos; y así todos quienes fueron configurando este ser nacional. Que no se basó en la raza... la identidad nacional para nosotros fue un valor cultural.”15

Parecería que la libertad religiosa solo era posible para los europeos, los afro umbandistas no tuvimos la misma suerte, o simplemente no encajaban dentro de la categoría de ciudadanos uruguayos, ya que las leyes que justificaban el discurso del Presidente, jamás los contempló.
El inicio de Umbanda en el Uruguay es una réplica fiel de lo acontecido en Brasil, de lo sucedido en Argentina, en Paraguay y en otros, ¿por qué se le tiene tanto temor? ¿Será que las huestes del bajo fondo vibratorio (que también operan en nuestro plano e inciden en casi todos nuestros asuntos) se sienten amenazadas? Y si así no fuera, ¿cual sería la razón que explicaría tanta intolerancia (que obviamente proviene del miedo), hacia las franjas más desprotegidas, que son al fin, quienes encuentran cobijo y protección en ella?

Esta es historia reciente, y sería importante que los jóvenes afro umbandistas del Uruguay, tomaran conocimiento de estos procesos para valorar y respetar el trabajo y lucha de muchos de nuestros antepasados o ancestros. De cualquier manera y felizmente, aún siguen vivos muchos de aquellos pioneros que sufrieron el peso de la intolerancia y la humillación, para ellos, vayan nuestros más sinceros agradecimientos, en estos 104 años.

En estos 104 años de vida, tomados desde la manifestación del Caboclo de las 7 Encrucijadas (que no es la única versión del origen de Umbanda) ya que la mayoría de los investigadores acepta (fuertemente)  que Umbanda es de origen colectivo. Por supuesto que su historia es más amplia y basta de lo que estamos compartiendo con nuestros amables lectores, pero autocríticamente nos pareció que es importante ver nuestros ángulos negativos.

De todas maneras, nos gustaría realizar un pequeño homenaje aquellos pioneros de Umbanda en el Uruguay, quienes al fin, introdujeron la religiosidad afro brasilera en nuestro territorio. Esperamos ser justos con todos, porque sabido es, muchos han trabajado y trabajan en el más puro anonimato, vaya para ellos también nuestro reconocimiento y agradecimiento.
Para finalizar y a modo de homenaje, (según la bibliografía consultada):

De la ciudad de Santa Ana do Livramento, Mae Teta, Pai Armando Ayala (hijo de la Mae Teta) Pai Roberto (hijo de la Mae Teta), Mae Teresa das Matas, Mae Jorgelina y Pai Nazario de Ogum, Pai Beto de Oxossi, Pai Urbano Mota (nuestro abuelo religioso) y por último una médium de la ciudad de Artigas, considerada la médium más antigua: Doña Ramona Arrieta (1936)
Un Saravá enorme para todos ellos y nosotros, en estos 104 años de vida

CENTRO UMBANDISTA REINO DA MATA
FUENTES CONSULTADAS
  • Las Américas Negras: Roger Bastides
·         Monografía presentada por  José E. Motta de Oliveira ante el Centro Universitario Moacyr Sreder Bastos
·         Das Macumbas a Umbanda, A construçao de uma Religiao Brasileira. José Motta de Oliveira
·         Racismo y Derechos Humanos en el Uruguay de Romero Jorge Rodriguez
·         Cultos de Posesión en el Uruguay de Renzo Pi Hugarte
  • Macumba, Terapia del Pueblo. Aglimira Villalba
  • Umbanda. Armando Ayala
La Macumba. América Moro y Mercedes Ramírez.




1 Nina Rodriguez: El animismo fetichista de los negros de Bahía (1900). ↩ volver
2 Médium, término utilizado por Allan Kardek para definir aquellas personas con capacidades extra sensoriales. ↩ volver
3 Ver artículo publicado en nuestro blogspot referente a la iniciación: INICIACION EXPERIENCIAS DE VIDAS. ↩ volver
4 Brasil fue el último País en decretar la abolición de la esclavitud (13 de mayo de 1988). ↩ volver
5 Monografía presentada por  José E. Motta de Oliveira ante el Centro Universitario Moacyr Sreder Bastos. ↩ volver
6 Idem a la anterior. ↩ volver
7 Roger Bastides: Las Américas Negras. ↩ volver
8 Roger Bastides: Las Américas Negras. ↩ volver
9 A diferencia de los Yorubas, los bantúes cultuaban un espacio específico de la naturaleza, asociado a su tierra natal, el cual, obviamente, no pudieron transportar América. ↩ volver
10 La comunicación con los Espíritus se remite casi al origen del hombre mismo, basta leer los libros más antiguos para confirmar esta acertiva. Pues sí, lo que eran manifestaciones espontáneas y hasta naturales en tiempos pretéritos, pasó a ser ordenada y codificada a partir de  Allan Kardec. ↩ volver
11 Para que tengamos una idea de los obstáculos con los que se enfrentaban aquellos pioneros, observemos el texto del código penal de 1890 y que estuvo vigente hasta el año 1941: en la relación de crímenes contra la salud pública constaba en el artículo 157 decía lo siguiente: “practicar el espiritismo, la magia y sus sortilegios, usar talismanes y cartomancia, para despertar sentimientos de odio o amor, inculcar cura de molestias curables o incurables, en fin, para fascinar y subjugar a la credulidad pública” Guimbelli, Emerson: “O baixo espiritismo” y la historia de los cultos mediúnicos. Op.cit. Monografía presentada por  José E. Motta de Oliveira ante el Centro Universitario Moacyr Sreder Bastos. ↩ volver
12 Renato Ortiz: (1999). ↩ volver
13 Racismo y Derechos Humanos en el Uruguay de Romero Jorge Rodriguez. ↩ volver
14 En dicho Departamento, también se encontraban registrados garitos, prostíbulos y prostitutas (con el debido respeto que nos merecen todos ellos). ↩ volver
15 Racismo y Derechos Humanos en el Uruguay de Romero Jorge Rodriguez. ↩ volver

2 comentarios:

  1. Gracias Maria Padilha por tu inmensa ayuda...doy fé de que la ayuda fue inmediata...mi pareja cortó la relacion inesperadamente y de forma abrupta....desesperada..hice de todo para recuperarlo...nada funcionó...ni santos, ni rezos, ni plegarias, ni buenos tratos hacia él...él solo me despreciaba, me miraba con asco...me ignoraba..ya no sabía que hacer...pensé en lo peor...matarme...estaba completamente destrozada.....un día llegó a mi Maria Padilha..inmediatamente le empecé a pedir con el corazón abierto que me ayude....ya el segundo día de rezarle vi resultados...y así diariamente hasta recuperar a mi amor...a todo aquel que esté atravesando una situación similar...le regalo de corazón esta oración que salvó mi pareja...gracias Reina Pomba Gira María Padilha...gracias gracias gracias

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  2. Gracias Maria Padilha por tu inmensa ayuda...doy fé de que la ayuda fue inmediata...mi pareja cortó la relacion inesperadamente y de forma abrupta....desesperada..hice de todo para recuperarlo...nada funcionó...ni santos, ni rezos, ni plegarias, ni buenos tratos hacia él...él solo me despreciaba, me miraba con asco...me ignoraba..ya no sabía que hacer...pensé en lo peor...matarme...estaba completamente destrozada.....un día llegó a mi Maria Padilha..inmediatamente le empecé a pedir con el corazón abierto que me ayude....ya el segundo día de rezarle vi resultados...y así diariamente hasta recuperar a mi amor...a todo aquel que esté atravesando una situación similar...le regalo de corazón esta oración que salvó mi pareja...gracias Reina Pomba Gira María Padilha...gracias gracias gracias

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